Uno de los encantos de nuestra tierra, es sin duda alguna el Calvario del Carnaval de Oruro, Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad.
Esta actividad se inicia conjuntamente el Primer Convite, es decir el primer domingo de noviembre después de la fiesta de Todos Santos. El Calvario según se cree, nació hace varios siglos y por lo general estaba situado en las afueras de la Villa de San Felipe de Austria. Se cree que una de sus primeras ubicaciones estuvo en el cerro Pie de Gallo.
Posteriormente y como un culto a la Virgen del Socavón, su ubicación cambió situándose en la Plaza Argentina conocida antiguamente y ahora como Plaza del Folklore que está colindante con el Santuario de la Virgen del Socavón.
Allí los artesanos muestran todo su talento, exponiendo miniaturas de toda naturaleza, desde dulces, juguetes, comida, objetos, muñecos y otros. Asimismo, se realizan los sorteos de tortas y todo tipo de productos. Es uno de los lugares más visitados en el año y su duración es hasta el lunes de Carnaval, conocido también como el Día del Diablo y del Moreno, que es cuando los artesanos se despiden con una serie de rituales hasta el próximo año.
Las personas que compran con fe esos objetos, los llevan hasta el Santuario de la Virgen del Socavón para hacerlos bendecir y con la fe que se tenga, se logrará acceder a esos bienes.
La gastronomía es otro de los atractivos del Calvario, ya que los comerciantes preparan riquísimas delicias de la culinaria tradicional.
Definitivamente el Calvario es un orgullo de la ciudad de Oruro, donde se reúnen personas de todas las clases sociales y es motivo de admiración de los ocasionales visitantes, que consideran al Calvario como un encanto de nuestra tierra.
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