Guardia Municipal "casi mata" tradición del Convite

Los uniformados de la Guardia Municipal "casi mataron" ayer la tradición del Convite que practican los "mañazos" en las calles Cochabamba entre Petot y Linares, al no permitir que se comparta una tutuma de chicha con danzarines de otros conjuntos folklóricos, apegados en la Ley 259, que prohíbe el consumo de bebidas alcohólicas en las calles de la ciudades del país.

El Convite como tal tiene dos componentes tradicionalmente hablando, el primero, es el permiso (en el caso del Primer Convite) y la ratificación de bailar en el Carnaval de Oruro, Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad, ante la Virgen del Socavón.

Un segundo componente, que es la tradición como tal, en el contexto de la palabra "convidar" de donde proviene la palabra Convite y consiste desde hace tiempo que los danzarines de la Gran Tradicional Auténtica Diablada Oruro esperen con tachos de chicha o botellas de cerveza y al paso de los integrantes de la Morenada Zona Norte por la calle mencionada, compartan una tutuma de chicha en señal de confraternidad y amistad.

Ese hecho tradicional estuvo en peligro ayer, porque los guardias municipales se portaron muy estrictos para evitar la repartición de la chicha, aspecto que causó molestia no solo en el directorio de la institución, sino también en los antiguos danzarines quienes afirmaron enfáticamente, que una tradición del Carnaval de Oruro, estaba a punto de morir.

El ex presidente de la Diablada Auténtica, Sebastián Vela Sejas dijo que se prepara en principio el refrigerio para los danzarines y luego se convida a los integrantes de la Morenada Zona Norte.

"Por lo menos queremos que nos den un refrigerio, que los danzarines piden; pero las autoridades dicen que no, eso está muy mal. Los músicos también piden porque en el trayecto no se les ha dado nada. Quiero pedir a las autoridades que tampoco sea tanto así, que nos prohíban dar el refrigerio, con esta actitud estarían eliminando la tradición del Convite", aseguró.

Ante ese hecho, los periodistas se comunicaron con el jefe de la Oficina de Defensa al Consumidor del Gobierno Autónomo Municipal, Pedro Siles, a quien se le explicó la parte de la tradición. Al tener conocimiento de esa situación, autorizó que se practique el Convite, ante el compromiso de los directivos de la Auténtica, de retirarse una vez que compartan con los morenos.

Minutos después los diablos del buzo naranja esperaron a sus amigos de la morenada, a quienes les invitaron la tutuma de chicha a su paso por la calle Cochabamba entre Petot y Linares, para luego irse del lugar como si nada hubiese pasado.