La pasarela de cemento, que demandó 1.8 millones de bolivianos, al municipio de Oruro, no sirve para utilizar en el Carnaval 2015, porque “se congestiona en el caracol” de la parte de arriba y pone en peligro a las personas, cuando hay mucho congestionamiento.
La versión fue confirmada por el alcalde municipal, Juan José Ramírez, después de recibir opiniones de técnicos y autoridades locales y nacionales y expertos en el tema, a fin de evitar cualquier accidente durante el desarrollo del Carnaval de Oruro, Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad.
“Nuestro objetivo debe ser la circulación de peatones, pero la nueva pasarela es poco funcional y, por eso, se ha decidido que sea utilizada únicamente para la transmisión del carnaval, donde se puedan instalar los canales de televisión y emisoras”, dijo.
La pasarela fue construida por la exalcaldesa municipal, Rossío Pimentel, como una obra estrella, pero técnicamente, por la parte de arriba, tiene un caracol que se convierte en angosta y solamente permite el paso de una persona. En esas condiciones, según los técnicos y los policías que estudiaron el sistema de seguridad, “no es posible utilizar esa pasarela, para una multitud de gente”.
El coordinador de la secretaría de cultura de la Municipalidad, Fernando Nava, dijo que es recurrente la preocupación de todas las autoridades y por ese motivo, no puede funcionar como pasarela.
“La Fiscalía y el Viceministerio también recomendaron que esa pasarela no se use para el Carnaval de Oruro, que concentra multitudes, sino que sirva únicamente para un punto de transmisión del Carnaval y, en un futuro, se pueda resolver ese problema de congestionamiento de personas”, explicó.
Por ese motivo, solamente se habilitarán pasillos de escape para el público, en el trayecto del Carnaval de Oruro. Una prueba se realizará con motivo del último convite, previsto para el domingo 8 de febrero, donde miles de danzarines efectuarán el último compromiso ante la Virgen del Socavón, para bailar durante tres años en la Entrada del Carnaval.
Según Nava, “la pasarela puede soportar gran cantidad de gente, pero se congestiona en la parte de los caracoles y ahí no se puede resolver el problema en forma inmediata y se tendrá que modificar ese aspecto para el Carnaval 2016, pero no para el Carnaval 2015”.
La pasarela fue entregada por la ex alcaldesa Pimentel, el 5 de agosto del 2014, en la calle Montesinos, esquina 6 de Agosto y fue diseñada para soportar 500 kilos por metro cuadrado. Dijo que su objetivo era “embellecer la ciudad”.
Según el alcalde actual, Juan José Ramírez, ningún técnico de la exalcaldesa le orientó cómo se podría garantizar su uso en la época de mayor afluencia de gente y, en esas condiciones, no se puede disponer de un lugar, “hermoso, pero nada seguro para recibir una multitud de gente”.
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