Desde muy temprano ayer, la Unidad de Regulación Urbana del Municipio realizó una inspección a todas las estructuras de las graderías establecidas a lo largo de la ruta del carnaval, con el único fin de que las mismas cumplan con las disposiciones específicas del reglamento vigente, por la importancia de brindar seguridad y comodidad al espectador.
Llegando a la explanada de la Avenida Cívica, se identificó que varias estructuras carecían de autorización para su implementación, además que las mismas no brindaban seguridad alguna por las características en su armado.
"No podemos hacer un carnaval en vísperas del carnaval, ellos han querido colocar graderías en la cúspide de las graderías de la parte oeste de la Avenida Cívica sin autorización alguna del Gobierno Municipal, justificando que son vecinos de la zona. La orden del alcalde ha sido retirar de manera inmediata, hemos realizado un operativo y así lo hemos cumplido", afirmó la primera autoridad del municipio, Edgar Bazán Ortega.
La Guardia Municipal actuó en apoyo a esta determinación, que a su vez generó la reacción y molestia de los directos propietarios quienes indicaron que asumirían medidas legales en contra de las autoridades en los próximos días.
"Tenemos que respetar la normativa, todo lo que no es correcto, todo lo que está viciado de nulidades o irregularidades, nosotros vamos a retirar, entonces, la ciudadanía también tiene que cooperarnos para que nuestro carnaval salga todo un éxito", añadió.
El burgomaestre orureño sostuvo que no corresponde "aprovecharse del carnaval", más aún si no se cuenta con toda la documentación que respalde un determinado fin o actividad, en este caso el armado de graderías. Por tanto, los controles en todo ámbito serán estrictos tanto el día de hoy, como durante el Domingo de Carnaval que es donde existe gran concentración de personas del interior y exterior del país.
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