Diferente al Sábado de Peregrinación, las caretas fueron adornadas con globos y serpentinas, como cada danzante se ponían en tonos más festivos, para luego bailar, esta vez no por devoción, sino festejando, que pudieron llegar un día antes a los pies de Nuestra Señora del Socavón.
Cerca de las 08:00 horas empezó la participación de los 52 fraternidades afiliadas a la Asociación de Conjuntos del Folklore de Oruro (ACFO) concentradas en la calle Aroma y Potosí, donde respetando el rol de ingreso emitido por esta entidad, se dedicaron a manifestar su alegría y compromiso por defensa de la cultura y folklore boliviano.
Quien encabezó la entrada del Domingo de Corso, fue el Conjunto Tradicional Folklórico Diablada Oruro, posteriormente, el Conjunto Tradicional Llamerada Zona Norte puso el ritmo que mantuvo y en muchos casos subió la temperatura a una templada jornada. Los diferentes conjuntos mostraron alegría y entusiasmo, de igual forma, el público aplaudió cada una de las presentaciones.
La tradición del Domingo de Carnaval es que las caretas estén adornadas de globos, mixtura y serpentina, de hecho muchos conjuntos eligen un padrino quien se encarga de este adorno, a esta tradición se la conoce como tik´ancha.
En otros conjuntos folklóricos son los pasantes o el directorio, quienes se encargan de adornar las caretas como una forma de confraternización y celebración.
Otra característica del Domingo de Corso, es que muchos conjuntos cambian el ritmo, como las diabladas que en algunos trayectos fueron acompañadas del ritmo de huayño y bailaron cueca como al modo de descansar, también se escuchó la kacharpaya.
Por supuesto, no faltó la Diablura Chilena Sogalbe que hizo su presentación pasando el mediodía, este grupo se creó con el propósito de mofarse de la copia que intentan hacer países como Chile y Perú de la danza de la diablada.
También este grupo hizo referencia al tema político que actualmente se vive en el país.
No hay comentarios:
Publicar un comentario