Notablemente molesto, el titular de la ACFO, aseguró que en ningún momento se prohibió a ningún danzarín o conjunto afiliado a este ente, a que participe de la sesión fotográfica del profesional mexicano, Luis Alberto Solís, porque él no tenía conocimiento de esta actividad, por lo mismo no podía intervenir en la misma.
El lunes por la mañana, Silvia Padilla, en conferencia de prensa, aseguró que Jacinto Quispaya prohibió a los danzarines que participen de la actividad, mencionando a la Fraternidad Artística y Cultural La Diablada y a la Diablada Artística Urus, cuyos directivos informaron sobre la prohibición.
En la conferencia de prensa en la ACFO, estuvieron los presidentes de los conjuntos mencionados, Patricia Lafuente y Casto Navía, respectivamente, quienes negaron que existiría alguna prohibición para esta actividad en particular, desmintiendo la versión de la autoridad cultural del GAMO.
El presidente de la ACFO, fue enfático en señalar que este tipo de actitudes alejan un acercamiento con el GAMO, particularmente para la organización del Carnaval de Oruro, Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad, recordando que existe un voto resolutivo de asamblea, que determina que mientras Silvia Padilla continúe en ese cargo, no puede haber entendimiento. Además, presentó varias cartas de solicitud que se dejaron en despacho de la alcaldesa Hilaria Sejas, pidiendo una reunión, mismas que no fueron respondidas desde julio pasado, demostrando que no existe la intención de solución de este conflicto.
Por otro lado, ante la preocupación demostrada por los periodistas sobre la organización del Carnaval de Oruro 2019, Jacinto Quispaya, aseguró que está garantizado, porque se trabaja con el Comité de Etnografía y Folklore, con la esperanza de que el Municipio recapacite y se empiece a coordinar acciones.
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